Los investigadores han relacionado por primera vez los niveles bajos de coeficiente intelectual en los niños con un entorno deficiente.

Los investigadores han relacionado por primera vez los niveles bajos de coeficiente intelectual en los niños con un entorno deficiente.
El smog urbano puede dañar seriamente el desarrollo cerebral de un niño. Los científicos estadounidenses llegaron a esta conclusión. El estudio involucró a 249 mujeres de Nueva York que usaron sensores especiales que detectan la presencia de sustancias nocivas en la atmósfera durante los últimos meses del embarazo.
La mayoría de las mujeres vivían en las afueras de la ciudad, en el norte de Manhattan o en el sur del Bronx, y estaban expuestas regularmente a los peligros ambientales típicos de la ciudad, principalmente por los escapes de automóviles, autobuses y camiones.
Cuando los hijos de estas mujeres tenían 5 años y tenían que ir a la escuela, se les pidió que hicieran una prueba de coeficiente intelectual. Como resultado, aquellos niños que se encontraban en un entorno ecológico más dañino incluso antes de nacer tenían un nivel de desarrollo intelectual de 4 a 5 puntos más bajo que el de sus pares.
"Esa es una diferencia lo suficientemente grande como para afectar el éxito de estos niños en la escuela", dice Frederica Pereira, autora del estudio.
Los investigadores han estudiado las fuentes de contaminación que pueden tener un impacto negativo en el desarrollo de un niño. Resultaron ser escapes de vehículos y emisiones de fábrica.